Es muy de agradecer que haya quienes redacten sus memorias para evitar que un fallo encadenado de las neuronas sumerja nuestros recuerdos en la noche de los tiempos. Memorias. Vivencias no expresadas por diferentes motivos, expuestas al olvido salvo que las rescatemos y las demos a conocer públicamente. Habrá quien cuente sus memorias por dinero, o por afán de notoriedad. Habrá quien las cuente para testificar personalmente su paso por la vida y la verdad de su historia. Parece claro también que el impacto de las memorias no es el mismo que si lo que se dice en ellas se hubiese dicho en el momento de producirse los acontecimientos vividos, treinta, veinte o diez años antes.
En el mes de marzo de este año 2015, Editorial Planeta ha publicado el libro "JOSÉ BONO DIARIO DE UN MINISTRO". En la página 34 cuenta una vivencia del mismo jueves 11 de marzo de 2004: A las 20.30 horas contacto con Pedro J. Ramírez: "Me ha llamado Aznar y lo tiene clarísimo: ha sido ETA. Pero no me ha dado ni un solo argumento con pruebas que avale su tesis. Es más, me ha dicho que han encontrado una furgoneta con una cinta en árabe y unos detonadores. Tras escucharle, yo, Pepe, me inclino por los moros, por Al Qaeda". ¡Asombroso! ¡De traca! Injustificable e imperdonable la actitud mantenida por Pedro J. Ramírez (director del periódico EL MUNDO por aquel entonces y en los diez años posteriores), conociendo ahora el contenido de aquella conversación. Cuánta energía nos hubiésemos ahorrado algunos (yo por lo menos), si a los pocos días Pepe (José Bono) hubiese dicho en voz alta y públicamente lo dicho por Pedro J. en la conversación mantenida.
Desconozco los motivos por los que José Bono no lanzó a los cuatro vientos esta conversación –y más vivencias relacionadas con el 11M– que ahora escribe en sus Memorias: ¿razones de amistad?, ¿exigencias del cargo?, ¿cálculo programado?... Mejor haberlas dicho en su momento, cuando las teorías conspirativas auspiciadas por Pedro J. Ramírez desde el periódico EL MUNDO fracturaban a la sociedad española. Ahora ya son Memorias. En cualquier caso es de agradecer su publicación más de diez años después del 11-M. Su DIARIO DE UN MINISTRO contribuye a que hoy tengamos más Memoria Histórica del 11-M.