Esta carta la escribí el 1 de agosto de 2008
He leído en elplural.com que la revista del Arzobispado de Madrid, Alfa y Omega, controlada por Rouco Varela, en la columna de opinión que aparece bajo el seudónimo de Gonzalo de Berceo, pregunta al Gobierno: "...ya de paso, qué pasó de verdad el 11-M". Resulta extraño que pasados ya más de cuatro años desde los atentados del 11 de marzo de 2004 todavía la "lengua divina" no haya caído sobre las cabezas de la Conferencia Episcopal para revelarle "la verdad" y a su vez el aparato eclesiástico la traslade a su feligresía. Tan extraño como que no recuerden las consecuencias que las cruzadas trajeron y han traído. En el caso que nos ocupa, la cruzada organizada por Bush, Aznar y Blair contra Irak con la consiguiente respuesta de otra feligresía: la yihadista. “Cabe esperar el recrudecimiento de la amenaza terrorista si es que se produce la guerra contra Irak, una amenaza que afectará principalmente a los países que participen en ella”, vaticinó –de vaticano quizás– la FAES de Aznar a principios de 2003. Pero tranquilos, esto de la Iglesia Oficial y su entorno de propagandistas ya no resulta nuevo. Os acompaño la carta de fecha 14 de marzo de 2007 titulada EL OBISPO DE HUESCA Y EL 11-M, una de las más de treinta cartas contenidas en el libro 11-M CARTAS AL DIRECTOR