Entre el 2004 y el 2008, el Partido Popular y la derecha mediática encabezada por El Mundo utilizaron el 11-M como ariete para desestabilizar y derribar la primera legislatura del Gobierno del PSOE de José Luis Rodríguez Zapatero. No lo consiguieron y en el 2008 Zapatero volvió a ganar las elecciones. La estrategia de utilizar el 11-M resultó un fiasco para el Partido Popular, que entendió debía desvincularse de la "teoría de la conspiración" que El Mundo y otros sectores mediáticos y políticos seguían manteniendo.
El sistema financiero de Estados Unidos entró en crisis en el 2007, el pánico cundió en los mercados y las Bolsas debido en gran parte a las "hipotecas basura" y lo que parecían "problemas financieros" se convirtió en una profunda crisis mundial, no sólo española. Un año después los bancos tuvieron que ser rescatados y en España la crisis se agudizó aún mucho más por el pinchazo de la burbuja inmobiliaria, un asunto que venía de muy atrás, de gobiernos anteriores de diferente color político.
El aumento del paro hizo variar de estrategia al PP y dejar de lado el 11-M. El 11-M ya no le era rentable para asaltar el poder; la "teoría de la conspiración" orquestada entre el PP y El Mundo no había dado los frutos apetecibles. En el comienzo de la segunda legislatura de Zapatero, con la crisis mundial, y la española en particular, en aumento, el PP tenía claro por donde atacar a Zapatero: por el flanco económico. El 11-M ya no le interesaba para desgastarle.
Como ejemplo del viraje en el que Rajoy deja tirado a El Mundo con su teoría de la conspiración, lean este pequeño extracto de una entrevista que el director de El País, Javier Moreno, le hace a Rajoy el 06/03/2008, antes de las anteriores elecciones:
LAS TEORÍAS SOBRE EL 11-M P = Pregunta de Javier Moreno. R = Respuesta de Rajoy
P. Volviendo al debate. Me pareció entender que ya no
alberga dudas sobre la autoría del 11-M.
R. No. Es lo que han dicho los tribunales de justicia.
No albergo ninguna duda sobre la sentencia.
P. ¿Cuándo se dio cuenta de que estaba equivocado?
R. En el primer momento creí, como todo el mundo, que
había sido ETA. El sábado y el domingo empecé a tener dudas, y luego ya, a la
vista de los acontecimientos, cambié de opinión. El sábado y el domingo empecé
a tener mis dudas. Yo sólo dije que creía que había sido ETA, porque, claro, yo
no estaba en el Gobierno. Tenía la convicción. Lo dije el viernes. Y ya hoy, lo
que digan los tribunales. Es evidente que es lo que es.
((( Lean
atentamente las respuestas respectivas a las dos preguntas que siguen a
continuación; no tienen desperdicio. A ver si es posible que las lean una y mil
veces la conspiranoia del PP: Cospedal, Arenas, González Pons, Esperanza Aguirre,
etc; la conspiraonia mediática: Pedro J. Ramírez, Jiménez Losantos, Luis del
Pino, etc.; y todos cuantos han cifrado su existencia en la perversa
manipulación del 11-M )))
P. ¿Podría ser más preciso? ¿Cuándo se convenció de
que los autores eran islamistas?
R. Hace tanto tiempo...
P. ¿Hace mucho tiempo?
R. Hace muchísimo tiempo.
P. Pues el 13 de marzo de 2006 todavía declaraba usted
lo siguiente: "Ahora dice la policía que no estaba allí una mochila que
fue básica para decir quiénes fueron los autores, y que fue básica para la
investigación; es que esto si se confirma, podría anular la investigación y el
sumario". Si ya tenía la convicción de que eran los islamistas...
R. Sí, pero no tiene nada que ver. Se trata de un
comentario sobre la validez de una prueba. No pongo en duda la autoría.
P. ¿No tiene ninguna autocrítica que hacerse por haber
sembrado tantas dudas durante cuatro años del que ha sido el peor atentado de
España, en los que se ha arrastrado por el fango al juez instructor, a los
fiscales, a policías y a guardias civiles?
R. Sinceramente, yo no he llevado este tema al
Parlamento nunca. Nunca. Nunca he participado en ningún debate sobre el 11-M ni
he formulado ninguna pregunta sobre el 11-M. Mi posición sobre el 11-M siempre
ha sido: "Oiga, vamos a mirar hacia adelante y que sea lo que decidan los
tribunales". En el segundo debate tuve la sensación, y así lo dije, de que
alguien quería volver a ganar las elecciones por el 11-M. A mí se me pueden
reprochar muchas cosas, pero haber enredado en este tema me temo que no. Oiga,
pregunte usted en otro lado.
P. Como presidente de su grupo parlamentario, sí
autorizó más de 300 preguntas parlamentarias que, por sí mismas y en conjunto,
sostenían un colosal edificio de conspiraciones con servicios secretos,
policía...
R. No, no. Es su legítima opinión, pero sólo eran
preguntas. Nadie hizo ninguna afirmación de que fuera ETA ni que dejara de
serlo en los últimos tiempos. Acaso se puede encontrar la declaración puntual
de alguno, pero la posición de mi partido y de su presidente, que soy yo, fue
que esto lo resolvieran los tribunales y seguir hacia delante.
La entrevista completa la pueden leer en Rajoy: "Si gano llamaré al PSOE para que se abstenga en la investidura"
Pese a estas declaraciones de Rajoy, otros dirigentes
del PP como, por citar sólo tres casos, Mª Dolores de Cospedal: "Aún
esperamos a saber toda la verdad", Javier Arenas, (Otro gran titular de El
Mundo de fecha 26.01.2011): "Arenas relaciona a los autores intelectuales
del 11-M con ETA" y González Pons: "El PP desclasificará todos
aquellos documentos que sirvan al esclarecimiento judicial del 11-M",
demuestran la doble cara que el PP se trae con el 11-M; quizás para contentar a
los conspiranoicos que dentro y fuera del partido les puedan aportar un puñado
de votos; quizás también para contentar y tener de su parte al periódico El
Mundo y al resto de todos los medios conspiranoicos (prensa, televisiones y
radios incluidos).
Lo que está claro es que ninguna de esas promesas de
Cospedal, Arenas, González Pons y otros se concretan en el Programa Electoral
del PP. Nada concreto sobre el 11-M en el programa. Ni un triste bocado del
11-M que los conspiranoicos se puedan llevar a la boca.
En cualquier caso y visto el doble juego hipócrita e
infame del Partido Popular en este asunto, ya veremos por dónde sale, pierda o
gane, el día 21 de noviembre. Tiempo al tiempo.